nº11 ¿Por qué y de qué modo se trasmite la divina Revelación.mp3
Playback Rate 1
Timecode: 00:00:00
nº11 ¿Por qué y de qué modo se trasmite la divina Revelación.mp3
Speaker [00:00:05] Punto número 11 del Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, que con él, por cierto, comenzamos un apartado nuevo dentro de este capítulo segundo capítulo segundo, que era Dios viene al encuentro del hombre. Primer apartado era la revelación de Dios. El siguiente apartado, que a partir del cual hoy desarrollamos es.
Speaker [00:00:27] La transmisión de la revelación divina el punto 11, formula la siguiente pregunta Por qué y de qué modo se transmite la divina revelación?
Speaker [00:00:39] Y responde Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad, es decir, de Jesucristo. Es preciso, pues, que Cristo sea anunciado a todos los hombres según su propio mandato y haced discípulos de todos los pueblos. Esto se lleva a cabo mediante la tradición apostólica. Hay una primera afirmación. Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad. Es un texto de primera. Timoteo 2, 4. Hay una voluntad salvífica universal de Dios. El corazón de Dios lucha. Sueña por la salvación de todos los hombres. La posibilidad de que el hombre se pierda es un gran drama para Dios. ÉL ha entregado su vida por la salvación de todos los hombres. Imaginaros el sufrimiento del corazón de Dios, del corazón de Cristo, cuando le son arrebatadas las almas hayuna. Hay un pasaje evangélico especialmente conmovedor, que es la oración sacerdotales, adoración que tiene lugar cuando Jesús está después de la última cena, orando al Padre antes de su pasión, antes de ir a Getsemaní. En ese momento, Jesús ora al Padre por todas las almas que se le han encomendado para que no se pierda ninguna de las almas en ninguno de cuantos hemos sido encomendados. Vemos hoy como una madre que lucha por sus hijos y y está dispuesta a dar su vida por todos y cada uno y cada uno de ellos. Así pues, Dios lo da todo por la salvación de todas las almas. No está dispuesto a dejar a dar por perdida ningún alma. No hay una voluntad salvífica de Dios que también nos transmite a nosotros. Dios nos lo comunica. Dios nos lo transmite. Y cuál es la respuesta? Pues la respuesta es Jesucristo. Jesucristo es el Salvador del mundo. Luego, luego sería un gran pecado por nuestra parte si no compartir con el mundo esa voluntad salvífica de Dios. Sabéis qué significa la palabra Jesús? Etimológicamente, la palabra Jesús significa salvador. Entonces dar a conocer a Jesús a todo el mundo es posibilitar que el mundo se salve, que pueda conocer la salvación y así y así adherirse a ella. Cómo se sal? Cómo podrá salvarse el mundo si no conoce El Salvador? Si no ha conocido el nombre de Jesús, el revelador del Padre, la salvación ofrecida por el Padre al mundo. Tenemos una gran responsabilidad en que Jesús sea conocido, que Jesús sea amado. El mandamiento de las misiones, el mandamiento misionero es importantísimo y por todo el mundo y anunciar el Evangelio.
Speaker [00:03:48] Por desgracia, hemos perdido en la medida en que nos hemos secularizado, hemos perdido tensión misionera. Incluso a veces se ha dicho que no hay que ser proselitista. No hay que respetar, no respetar el proceso de las personas. Obviamente, también se puede entender el proselitismo de una manera incorrecta, porque lo cierto es que también dice el propio Benedicto XVI decía él que la evangelización se transmite por contagio, por testimonio. En este sentido, el proselitismo puede tener una mala, una mala interpretación. No es un concepto que no coincide exactamente con el del celo apostólico. Nosotros tenemos que ser estar llenos de celo apostólico. La palabra ser proselitista quizás tiene otros matices que hay que purificarnos, pero estamos llamados a arder en el celo apostólico. Tener el deseo de que todo el mundo conozca a Jesús, sufrir porque Jesús no sea conocido, que Jesús no sea amado. Cada vez que rezamos el Padrenuestro decimos santificado sea tu nombre. O sea que el nombre de Jesús sea conocido o sea amado. Hemos recibido un gran don, un gran don y tenemos una responsabilidad de qué hacer con ese don.
Speaker [00:05:18] Muchísimas personas en el mundo no conocen a Jesucristo.
Speaker [00:05:22] Somos incluso una minoría los que hemos conocido a Jesucristo en el mundo. Y podemos interpretar de una manera correcta que hemos sido que hemos recibido ese don no para enterrarlo, sino para tomar conciencia de que somos instrumento de Dios para que el resto del mundo conozca a Jesucristo en tu entorno. En mi entorno hay muchas personas que no han tenido un encuentro personal con Jesucristo y que entrecomillas la Biblia, la Biblia más cercana que tienen los evangelios más cercanos que tienen para poder conocer a Jesucristo. Eres tú o soy yo que nosotros podemos convertirnos en el Evangelio más cercano que ellos pueden tener para llegar a conocer a Jesucristo? Qué gran! Qué gran responsabilidad!
Speaker [00:06:12] Por eso hacemos nuestra no nuestra, aquella expresión de San Pablo, ay de mí, sino de evangelizar. Sería gordísimo. Sería algo muy grave que yo en mi vida haya sido inconsciente de que he recibido la fe en Jesucristo como un tesoro para los demás y lo haya guardado para mí. Dice la Sagrada Escritura gratis. Lo has recibido? Dalo gratis.
Speaker [00:06:42] Entre los quehaceres que pueda tener una persona en esta vida, difícilmente puede haber algo algo más importante que dar a conocer a Jesucristo.
Speaker [00:06:53] Al Mundo. Evangelizar. Dedicar nuestro tiempo, nuestro apostolado, a nuestro testimonio en nuestros medios económicos. Saber que esos misioneros que están en primera línea nos representan, nos representan y que nosotros no estamos apoyándoles, y que nosotros mismos somos misioneros cada vez más en primera línea, en primera línea de evangelización. Ay de mí, si no evangelizar.
window.offsetMs = 0 || 0;